
El 3 de agosto pasado, el vuelo UA81 de United Airlines con destino a Newark, en Nueva York, sufrió un retraso de varias horas (más de tres) por un motivo insólito, desconocido hasta ahora. El personal de los controles de seguridad del aeropuerto se fue a cazar renos.
No crean que estamos hablando de un aeropuerto menor. Desde el momento en que United opera, la cosa es de cierta entidad. Hablamos de Nuuk, la capital (por decirlo de alguna manera) de Groenlandia.
El motivo a cualquier otro aeropuerto le puede parecer menor, pero no lo es en Groenlandia. Ese día se abría la temporada de caza, que es muy limitada. Así que se marcharon, sin nadie que mirara los escáneres.
Absolutamente nadie en Groenlandia está enfadado: cazar es fundamental en la vida de la región, porque después no se sabe si el tiempo lo permitirá. En los días de caza, los ciudadanos llenan sus neveras de carne, aunque la mayor parte de las veces tampoco necesitan las neveras por las temperaturas habituales.
No se trata de un hecho inusual. Ese día, casi todo el país se paraliza para cazar. Para quien sí todo fue novedoso fue para United Airlines, que perdió más de tres horas en la pista, sin poder partir.