Meliá hace balance del estado en el que se encuentra su planta hotelera de Myanmar y Tailandia, países en los que han fallecido miles de personas por el terremoto de magnitud 7,7 que se produjo el pasado viernes (Meliá abre un hotel en la isla de Phuket, al sur de Tailandia).
Gabriel Escarrer, CEO de la cadena que posee un establecimiento en Myanmar y cinco en Tailandia, acaba de informar que “nuestros hoteles están operando sin interrupciones”.
El líder del grupo detalla que sus alojamientos de Rangún, Bangkok, Chiang Mai, Koh Samui, Phuket y Pattaya “han sido sometidos a inspecciones exhaustivas por parte de las autoridades y organizaciones pertinentes para garantizar la seguridad de todos los huéspedes y el personal”. “Todos los huéspedes y el personal están seguros y bien cuidados”, prosigue.
Escarrer ha aprovechado la ocasión para trasladar un mensaje de apoyo a las familias y comunidades afectadas por el terremoto. “Nuestros pensamientos y condolencias están con ellos”, subraya.
