¿Qué es el mercado turístico?
Cuando hablamos del “mercado turístico”, nos referimos a todo lo que rodea la industria del turismo: desde los viajes que planeamos y los hoteles en los que nos quedamos, hasta las actividades que disfrutamos en nuestro destino. En pocas palabras, es el espacio donde se encuentran los viajeros con la gente que ofrece servicios para esos viajes.
Porque, si lo piensas bien, el turismo no se trata solo de viajar de Madrid a Paris; es todo lo que ocurre alrededor de esa experiencia: los vuelos, hoteles, excursiones, restaurantes… todo esto forma parte del turismo. Además, todo lo que pasa alrededor puede afectar este mercado turístico: cuánto dinero tienen los viajeros para gastar, qué destinos están de moda, qué tan fácil es llegar a ciertos lugares, e incluso temas como la economía y el medio ambiente.
Si un destino se vuelve popular en redes sociales, mucha gente querrá ir allí, lo que hace que la demanda aumente. O si hay una crisis económica, la gente puede decidir viajar menos. Por eso, este mercado está siempre cambiando y adaptándose a lo que los viajeros quieren y a lo que ocurre en el mundo.
La estructura del mercado turístico y su funcionamiento
Para entender cómo funciona el mercado turístico, primero hay que conocer su estructura. Básicamente, se divide en dos partes: la oferta y la demanda. Vamos a verlas más a fondo para que quede más claro.
La oferta turística
La oferta turística es todo lo que está disponible para los viajeros. Hablamos de hoteles, apartamentos, vuelos, trenes, actividades como tours guiados, restaurantes y todo lo que un turista puede usar o comprar durante su viaje.
En verano todos queremos ir a la playa. La oferta turística sería todos esos hoteles junto al mar, los restaurantes donde puedes comer pescado fresco, los chiringuitos de playa, y actividades como alquilar una tabla de surf o hacer una excursión en barco.
Lo bueno de la oferta es que se adapta: si hay más turistas que buscan experiencias de aventura, aparecerán más opciones de deportes extremos; si prefieren algo tranquilo, se enfocará más en spas o actividades relajantes.
La demanda turística
La demanda turística es simplemente la gente que quiere viajar y consumir esos servicios. Depende de cuántas personas quieran ir a un destino, cuánto estén dispuestas a gastar, y la época del año.
Este verano tuve la genial idea de ir a la costa, evidentemente me encontré con que la demanda era altísima: el mundo entero estaba en la playa, así que me tocó reservar con mucho tiempo de antelación y los precios eran significativamente más altos. Eso es la demanda en acción, que puede cambiar según la temporada, los eventos del momento o incluso la moda (ay ¡los destinos cuando se ponen de moda!)
Al final, la oferta y la demanda son como las dos caras de la misma moneda: se equilibran para que el mercado turístico funcione y todos puedan disfrutar de su viaje.
Funciones del mercado turístico
El mercado turístico cumple varias funciones que hacen que toda la maquinaria de viajes funcione de forma fluida. Vamos a desglosarlas con ejemplos para que quede más claro.
Intermediación
Esta es la parte donde entran las agencias de viajes, plataformas de reservas como Booking o Airbnb, y otros intermediarios. Son los que hacen que la oferta y la demanda se conecten. Mi última escapada a Roma la organicé toda a través de una plataforma online: el vuelo, el hotel, y hasta un tour de comida callejera. Esos intermediarios son el “puente” entre lo que buscas como turista y lo que ofrecen los destinos.
Distribución de recursos
Aquí el mercado turístico se encarga de que todo esté en su sitio: desde tener suficientes empleados en los hoteles hasta organizar la logística de tours y transporte. Por ejemplo, si una ciudad ve que cada vez llegan más turistas en bicicleta, puede crear rutas especiales y hasta estaciones de alquiler de bicis para cubrir esa demanda. Así, todos contentos y todo funcionando como un reloj.
Promoción y comercialización
¿Alguna vez viste una foto de un lugar en redes sociales y pensaste que ese sería tu próximo destino? Esa es la promoción en acción. El turismo necesita darse a conocer, ya sea por campañas en TikTok, blogs de viajes o publicidad en general. Gracias a esto, los destinos se hacen populares y los viajeros los ponen en su lista de “lugares a visitar”. Recuerdo que acabé yendo a Lisboa solo porque vi un video genial en YouTube; fue puro marketing, y funcionó conmigo.
Adaptación y evolución
El turismo está siempre cambiando, y si el mercado no se adapta, se queda atrás. Por ejemplo, ahora mucha gente busca experiencias sostenibles, así que el mercado turístico ha empezado a ofrecer eco-lodges, tours responsables y experiencias respetuosas con el medio ambiente. ¡Lo que busques, seguro que lo encuentras!
¿Cuáles son las características del mercado turístico?
El turismo es un mercado único y aquí te cuento por qué:
- Es estacional: la demanda cambia según la época del año. Todos queremos ir a la playa en verano, mientras que en invierno las estaciones de esquí se ponen de moda.
- Variedad de productos y servicios: dentro del turismo hay de todo: hoteles, excursiones, restaurantes, actividades de aventura, rutas de museos, lo que se te ocurra.
- Influenciado por factores externos: el turismo se ve afectado por muchas variables: la economía, el clima, los eventos, e incluso la política.
- Interacción directa: en turismo, la experiencia es lo más importante. Hay un contacto muy directo entre el turista y el lugar que visita: desde la atención en un hotel hasta el guía que te lleva de tour. Esto hace que la calidad del servicio y la forma en que se traten a los viajeros sea clave.
- Global y local al mismo tiempo: aunque la gente viaja por todo el mundo, cada destino tiene su propio encanto local. Un hotel en Tokio es muy diferente a uno en la Toscana, y eso es lo que hace tan especial viajar. Al final, el turismo tiene esta mezcla de ser global, pero con sabor local en cada sitio al que vayas.
Las tendencias más importantes de este mercado
El turismo cambia según las modas y las preferencias de los viajeros. Estas son algunas de las tendencias que están pegando fuerte ahora mismo:
Sostenibilidad
Viajar de forma responsable es una prioridad para muchos. Una vez me hospedé en un pequeño hotel ecológico que usaba energía solar y servía comida local, y fue una experiencia increíble. Cada vez hay más alojamientos y actividades sostenibles para cuidar el medio ambiente y respetar a las comunidades locales.
Digitalización
Casi todo el mundo reserva sus viajes online, y si tú no lo haces, ¡te estás perdiendo de algo! Plataformas como Booking, aplicaciones para comparar vuelos como Kayak o Skyscanner y redes sociales para buscar inspiración hacen que planificar un viaje sea más fácil que nunca.
Experiencias personalizadas
Ya no se trata solo de quedarse en un hotel y visitar los monumentos más famosos. Ahora buscamos experiencias únicas, algo que no haga todo el mundo. Una vez, en lugar de hacer el típico tour por Florencia, tomé una clase de cocina italiana con una chef local. ¡Te lo recomiendo!
Turismo de bienestar
Viajar para relajarse y cuidarse está en auge. Los retiros de yoga, spas y destinos centrados en el bienestar son cada vez más populares.
Workation
No sé si conoces esta palabra, pero la idea es genial: trabajar mientras viajas. Con la posibilidad de teletrabajar desde cualquier lugar, cada vez más gente se lleva el portátil a la playa o a la montaña y combina lo mejor de ambos mundos: trabajar y viajar. Mi preferido.
Conclusión
El mercado turístico es un mundo en constante movimiento y lleno de oportunidades. Desde experiencias sostenibles hasta viajes digitales, cada vez hay más formas de explorar el mundo y encontrar lo que más se adapte a tus gustos y necesidades. Entender cómo funciona el turismo te ayudará a aprovechar todas las opciones que ofrece. Y lo mejor de todo es que el turismo sigue evolucionando, siempre hay algo nuevo por descubrir y experiencias únicas por vivir. Así que, ¿hacemos la maleta?