Este artículo fue escrito por Preferente. Haz clic aquí para leer el artículo original
El lugar donde Hamás protagonizó una masacre, asesinando a unas 300 personas y secuestrando a muchos de los asistentes, se ha convertido en un nuevo e inesperado atractivo turístico de Israel.
Según revela El País, el escenario de la barbarie recibe en la actualidad multitud de tours turísticos y visitas. El denominado dark tourism (turismo oscuro) tiene cada vez más adeptos, siendo Auschwitz, Hiroshima, Vietnam o Chernóbil algunos de los destinos estrella.