Un total de 22.450 millones de dólares alcanzó el mercado de los seguros de viajes y turísticos en 2023, con un alza espectacular en línea con el crecimiento brutal del turismo después de la pandemia.
Dentro de la industria del seguro, el de viajes es una rama muy específica: protege al turista de los imprevistos que, sobre todo en temas de salud, pueden resultar muy caros. Suele venderse agrupado y, en algunos países, es una exigencia para obtener una visa.
El mercado del seguro de viajes está dominado por unas pocas compañías que llevan años especializadas en las particularidades. Este 2024 se prevé un crecimiento que incluso puede ser superior al de 2023 que, respecto de 2022, supuso un 13 por ciento sobre el anterior. Hay que tener presente que el Covid ha jugado un papel importante al concienciar al viajero de que en cualquier momento puede quedar ‘tirado’ en lugares inverosímiles, con costes inasumibles.
Aunque los estadounidenses son muy proclives a tener seguros, el mercado europeo es el mayor del mundo, parte porque está más atomizado y el viajero no se encuentra dentro de ‘su casa’ en todos los lugares de Europa.
El 48 por ciento de toda la facturación proviene del turista individual. Lo demás son viajeros en grupo de una índole u otra.
El submercado que más crece actualmente es el de viajes de estudios, típico en jóvenes que acuden a otro país o a por un idioma o por una formación específica.
El gran desafío ahora de este mercado es su simplificación, usando productos ya preparados, que no se personalizan. Este tipo de seguros es el que está creciendo más.
