Nicolás Maduro, el presidente del Gobierno de Venezuela, ha anunciado que reducirá drásticamente las operaciones aéreas con España, después de que Madrid reconociera a Edmundo González, su contrincante en las últimas elecciones, como presidente legítimo del país (Golpe de Nicolás Maduro a Iberia, Air Europa y Plus Ultra).
Previamente, Venezuela ya había cancelado las comunicaciones aéreas con Dominicana, Perú y Panamá, lo que redujo el 54 por ciento de todas sus conexiones internacionales, ya muy mermadas por la poderosa crisis económica que afecta al país. De estas tres suspensiones, la verdaderamente complicada es la de Panamá, porque su aerolínea, Copa, se había convertido en la conexión de Caracas con el resto de América.
Actualmente, Air Europa, Iberia y Plus Ultra ofrecen conexiones con Madrid, siendo una de las mayores puertas de Venezuela a Europa (Plus Ultra: seis años volando entre España y Venezuela).
En unas declaraciones un tanto soñadoras, Vicky Herrara, la presidenta de la patronal de las Agencias de Viajes de Venezuela, lamentó que el cierre de estas rutas podría dejar al país sin conexiones para el turismo que en realidad ya es bastante marginal.
La visión del Gobierno de Maduro es enteramente política, considerando que está en una guerra contra la injusticia de que la supuesta victoria de Nicolás Maduro no sea reconocida.
