Ouigo ha intensificado su ofensiva en el mercado ferroviario español para avanzar en sus planes de expansión, y amenazar el liderazgo de Renfe en el mercado de la alta velocidad. Tras debutar en mayo de 2021 con la ruta Madrid-Barcelona, la compañía francesa ya opera en 12 destinos, y en 2024 prevé ampliar su cobertura hacia Sevilla, Málaga y Córdoba, una vez que reciba los trenes Alstom Euroduplex equipados con la señalización necesaria (Ouigo sigue desafiando a Óscar Puente, Renfe e Iryo).
Según informa Expansión, el objetivo a largo plazo de Ouigo es expandir su red de rutas hacia Galicia, Asturias, Andalucía Occidental (concretamente Cádiz y Huelva) y el País Vasco. No obstante, estas ampliaciones están condicionadas por la disponibilidad de material rodante y la finalización de infraestructuras clave (Ouigo replanifica sus operaciones en España).
“Ouigo aspira firmemente a ser operador de red, presente en todo el territorio nacional, beneficiando a los viajeros con las sinergias, economías de escala y resiliencia de una operación en red”, han destacado desde la empresa que comanda Helene Valenzuela.
De cara a cumplir sus objetivos, la empresa continuará apostando por su agresiva política comercial, la cual le ha llevado a ser el ojo de las críticas, principalmente por parte de Renfe y del ministro de Transportes, Óscar Puente. Este último lleva meses acusando a Ouigo de “competencia desleal”, “dumping”, y de hundir los ingresos de sus competidoras.
No obstante, su director comercial, Federico Pareja, aseguró que “esta oferta va a seguir, es nuestro posicionamiento de origen y nuestra forma de funcionar. Hay negocio, y nosotros apostamos por seguir nuestra hoja de ruta para ser una empresa que llegue a todo el mundo” (Ouigo se enfrenta a Óscar Puente: “Los precios bajos van a seguir”).
Con billetes desde nueve euros, ha conseguido una ocupación superior al 90% en sus trenes. Aunque los márgenes de beneficio son estrechos debido a la intensa competencia, confía en cumplir su plan de negocio a largo plazo, proyectando alcanzar la rentabilidad operativa en 2025. Mientras tanto, la presión del mercado ha impulsado a Renfe a adaptarse, ofreciendo tarifas similares con su marca Avlo, lo que ha incrementado la competencia.
En paralelo, otro actor en esta guerra de precios es Iryo, que presume de trabajar bajo una estrategia centrada en la calidad. A pesar de entrar un año más tarde en el mercado, la compañía ha logrado una sólida cuota de mercado y prevé un crecimiento del 25% en pasajeros para este año.