
La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha ratificado el aumento del 6,44% en las tarifas aeroportuarias propuesto por Aena para 2026, lo que supone la mayor subida de los últimos diez años, y deja fuera cualquier atisbo de congelación de las mismas (Tensión interna en Aena por el miedo a una congelación de tarifas).
La decisión confirma la propuesta que el gestor ya había planteado inicialmente, y que entrará en vigor el 1 de marzo de 2026, justo cuando deja de aplicarse la limitación legal que hasta ahora frenaba estos incrementos. La CNMC señala que la subida se sustenta en una revisión al alza de las previsiones de tráfico para ese año (Luz verde a la mayor subida de tasas aéreas de la última década).
De este modo, Competencia confirma que el incremento tendrá impacto en el precio de los billetes. Como publicó Preferente, el Ingreso Máximo por Pasajero Ajustado pasará de 10,35 euros a 11,02. En términos prácticos, esto se traduce en un aumento de 67 céntimos por viajero.
La decisión llega pese a las críticas reiteradas de las aerolíneas y del conjunto del sector. La Asociación de Líneas Aéreas (ALA), lleva años defendiendo una bajada o estabilización de las tasas, y entiende que esta subida “puede ser el preludio de nuevos incrementos en el próximo quinquenio si no se imponen nuevas limitaciones regulatorias a Aena”.
El caso de oposición más extremo viene siendo el de Ryanair, que ha suprimido millones de plazas en España en los últimos meses de cara a la próxima temporada de invierno y verano. Además, ha anunciado el cese total de operaciones en Tenerife Norte, Vigo, Valladolid y Jerez, debido a su guerra con Aena en los aeropuertos regionales.
Con este escenario, habrá que esperar a conocer si las aerolíneas repiten lo ocurrido en 2024, cuando se aprobó un alza del 4,09, que fue recurrida ante el Tribunal Supremo y la Audiencia Nacional por organizaciones como IATA, ALA y la propia Ryanair.
