
El mundo empresarial lanzó este lunes un nuevo alegato a favor de poner fin a la moratoria hotelera vigente en la capital catalana desde hace diez años, el llamado Plan Especial Urbanístico de Alojamientos Turísticos de Barcelona (PEUAT). Esta normativa, que impide construir nuevos hoteles en el centro de la ciudad, fue impulsada hace una década por la entonces alcaldesa Ada Colau y aún no ha sido revocada por el actual alcalde, Jaume Collboni.
Una imagen del Foro Barcelona, acto celebrado este lunes 17 de noviembre. Fuente: Hosteltur.
Las opiniones a favor de reiniciar la construcción de nuevos hoteles en el centro fueron lanzadas este lunes 17 de noviembre por destacados dirigentes empresariales durante el encuentro Foro Barcelona, un espacio de reflexión sobre turismo y desarrollo urbano. El acto, impulsado por el grupo hotelero Hotusa y el consorcio Turisme de Barcelona, aspira a consolidarse como una cita anual.
Según apuntó Josep Santacreu, presidente de la Cámara de Comercio de Barcelona, la capital catalana ha tenido más éxito que otras ciudades de tradición industrial —como Génova, Turín o Manchester— a la hora de reorientar su modelo económico, y los 15 millones de turistas que recibe al año son una prueba de esta transformación. “Este éxito ha comportado externalidades negativas, que deben gestionarse, pero también ventajas que normalmente se infravaloran”, indicó.
A su juicio, el turismo internacional seguirá aportando riqueza a la ciudad gracias al empuje de los mercados emergentes asiáticos. “Ahora es el momento de decidir qué ciudad queremos ser para el año 2050. Por ejemplo, podríamos crear nuevos ejes de atracción en el frente marítimo o en la zona del Fórum, con inversiones valientes y emblemáticas, lo que ayudaría a descongestionar el centro de la ciudad”.
Para avanzar en esta dirección, Santacreu reclamó que se dé luz verde a la ampliación del aeropuerto de Barcelona a fin de reforzar los vuelos intercontinentales con Asia. También abogó por proyectar el destino Barcelona más allá del término municipal, de manera que el flujo de viajeros y el gasto turístico alcancen a otros territorios, generando sinergias con la capital. En definitiva, “si ampliamos el terreno de juego ¿por qué no puedes construir entonces más hoteles? Todo está conectado. Se necesita una mirada más amplia”, defendió.
Otro dirigente que, indirectamente, se mostró partidario de revisar la moratoria fue Pau Relat, presidente de Fira de Barcelona. Tras recordar que Fira está ejecutando un ambicioso plan de expansión —que implicará ampliar y renovar sus recintos de Gran Via y Montjuïc— apuntó que será necesario llenar de actividad esos pabellones para garantizar la rentabilidad de las inversiones ya comprometidas.
Según explicó, la capacidad de captar grandes congresos e internacionales depende de una combinación de conectividad aérea, infraestructuras y miles de “plazas de alojamiento de calidad a precios competitivos”. Por ello, consideró que, si se está invirtiendo en ampliar la capacidad ferial para atraer más congresos, “deberíamos ser coherentes y dimensionar, acorde con estos planes de crecimiento, nuestras infraestructuras para acoger clientes internacionales, desde plazas hoteleras al aeropuerto”.
Pau Relat, presidente de Fira de Barcelona, y Amancio López, presidente del grupo hotelero Hotusa, ayer en el Foro Barcelona. Fuente: Hosteltur.
La apertura del evento contó con la participación del presidente de la Generalitat, Salvador Illa; el ministro de Industria y Turismo, Jordi Hereu; el presidente de Hotusa, Amancio López, y el alcalde de Barcelona, Jaume Collboni.
Amancio López reiteró su oposición a la tasa turística de Barcelona, dado que su incremento progresivo “penaliza la principal fuente de ingresos” de la ciudad. También recordó que “la capacidad de recibir turistas de un destino no es infinita”, y defendió que “podríamos estimular qué tipo de establecimientos más nos conviene y elegir la tipología de turistas que deseamos recibir. Por eso me parece un disparate que las viviendas se hayan transformado en pisos turísticos”. Insistió asimismo en que Barcelona necesita más vuelos de larga distancia y, para ello, la ampliación del aeropuerto resulta imprescindible.
Amancio López, Jordi Hereu, Jaume Collboni, Salvador Illa, Marina López, Clara López y Mateu Hernández, este lunes a su llegada al Foro Barcelona. Fuente: Hotusa.
Por su parte, Collboni reiteró “nuestra decisión firme de no renovar a partir de 2028 las licencias de pisos turísticos, porque queremos favorecer la accesibilidad a la vivienda y porque el impacto de los pisos turísticos genera externalidades que no queremos en la ciudad”. Recordó también que la recaudación del impuesto de pernoctaciones “se reinvierte en la ciudad”, ya sea en los Espacios de Gran Afluencia Turística o en el plan de climatización de escuelas de primaria.
“La tasa turística nos permite actuar sobre la demanda para favorecer un cambio de modelo, apostando por un mix de turismo”, dijo Collboni. Su objetivo es que, en el futuro, un tercio de los turistas que reciba Barcelona sea de ocio; otro tercio, cultural; y otro tercio, del segmento MICE. “Esta combinación nos permitirá equilibrar el modelo y aprovechar todo lo positivo de la industria turística, haciendo posible la convivencia”. Según concluyó, “en esta ciudad hemos llegado a consensos muy importantes entre el sector público y privado y entre administraciones”. Está por ver si el próximo gran consenso será el desbloqueo de la moratoria hotelera.