
Los hoteleros europeos han mostrado su respaldo a las agencias de viajes con la revisión de la Directiva Europea sobre Viajes Combinados. Hotrec, junto con otras múltiples organizaciones turísticas, ha emitido un nuevo comunicado reclamando una normativa más clara y equilibrada, que no genere cargas administrativas innecesarias ni afecte a la competitividad (Las agencias presionan a Bruselas para tumbar el límite a los anticipos).
Una las grandes luchas de los intermediarios viene siendo el controvertido límite a los anticipos. Las asociaciones entienden que permitir que cada Estado miembro establezca sus propias reglas podría fragmentar el mercado europeo y aumentar los costes para las empresas que operan en varios países (Directiva de Viajes Combinados: cambios que inquietan a las agencias).
Como viene publicando Preferente, la nueva ley propone que las agencias no puedan solicitar anticipos superiores al 25% del precio del viaje a menos que se den determinadas circunstancias especiales. Solo habrá una excepción: cuando los organizadores se enfrenten a costes que justifiquen un pago a cuenta más elevado.
También preocupa la propuesta de considerar como “paquete elaborado en 24 horas” cualquier combinación de servicios que un viajero añada a su reserva inicial dentro de las 24 horas siguientes. Los hoteleros sostienen que esta definición es “imposible de aplicar”, porque las empresas no pueden prever qué servicios extra contratará cada viajero.
Por otro lado, piden a Bruselas no crear nuevos mecanismos de reclamaciones ni sanciones específicas para los viajes combinados, ya que la legislación europea actual ya contempla herramientas suficientes para proteger al consumidor. A ello se suma la necesidad de que las garantías por insolvencia se calculen según el riesgo real de la actividad, y no con niveles máximos permanentes que generarían “costes innecesarios”.
Con todo ello, Hotrec, ETOA, ECTAA, Eu Travel Tech, CLIA y otras siete entidades, instan a los responsables políticos de la UE a “adoptar la claridad jurídica, la proporcionalidad y la armonización como principios rectores para el texto final de la Directiva”.
