
No sabemos en qué acabará la aventura, pero con todo el dinero de los petrodólares detrás, probablemente sea un éxito. Por eso vale la pena reparar en que este domingo voló por primera vez un avión de la nueva aerolínea saudí Riyadh Air, con la que el país pretende plantar cara a Emirates y Qatar Airways. El primer vuelo fue entre Arabia y el aeropuerto londinense de Heathrow (Arabia lanza Riyadh para competir con Emirates y Qatar).
Si se cumplen las ambiciones, Riyadh será en cinco años una aerolínea de nivel mundial, con cien destinos para ese momento.
En unos pocos días, la aerolínea saudí lanzará una segunda ruta a Dubái.
El vuelo de ayer a Londres partió de Riad a las 3.15 de la madrugada, ciertamente un horario no muy cómodo, para aterrizar en Londres a las 7.30 de la mañana. El regreso parte a las 9.30 y llega a las 19.15 de la tarde local.
La compañía, que lleva ya un año patrocinando el Atlético de Madrid y haciendo campañas publicitarias en todo el mundo, está desarrollando una introducción lenta y metódica. Sus aviones son Boeing. El primero que voló era un 787.
Los aviones de la compañía tienen cuatro asientos en clase business elite, 24 en business, 39 en premium economy y, finalmente, 223 en clase economy. Como ven, siguiendo lo que parece ya una norma, han eliminado la primera clase, aunque su segmento elite viene a ser lo mismo.
