
Los grandes turoperadores con aerolínea propia, como Jet2, están llamados a desempeñar un papel crucial en la transición hacia un modelo de turismo más sostenible. Gracias a sus economías de escala y a su posición intermedia entre los aeropuertos, los destinos y los viajeros, pueden contribuir de manera decisiva a reducir emisiones, coordinar esfuerzos y extender buenas prácticas en toda la cadena de valor turística, según explica Ricard Querol, General Manager de Aeropuertos y Organizaciones Turísticas de Jet2.com y Jet2holidays, durante una charla con Hosteltur previa al Encuentro de Sostenibilidad Turística Hosteltur, que se celebra el 23 de octubre en Benidorm.
El Encuentro de Sostenibilidad Turística Hosteltur reunirá a representantes del sector público junto a líderes y marcas clave de la industria para analizar iniciativas que han convertido la sostenibilidad en un factor de competitividad. Se abordarán desde modelos de gestión más eficientes y circulares hasta experiencias que impulsan la satisfacción del cliente, la fidelización y el posicionamiento de las marcas. A través del siguiente botón se puede consultar el programa completo y realizar la inscripción.
Entre los destinos y los clientes
“Estamos en medio de la ecuación, entre los destinos y los clientes. Creo que desde esta posición puedes contribuir y ayudar. Nuestro cliente, sabiéndolo o sin saberlo, ya está practicando un turismo sostenible gracias a la economía de escala de la turoperación”, subrayó Querol.
El directivo recordó que Jet2 opera actualmente con 1.400 hoteles contratados en España, de los cuales 600 ya cuentan con un certificado de sostenibilidad. “Estos hoteles se comprometen a aplicar buenas prácticas: uso de productos de proximidad, calidad en el empleo, energías renovables o materiales reciclables”. No es que el turoperador haya inventado nada a través de estos certificados, reconoce, pero lo importante es hacerlo de forma sistemática y a gran escala, indica.
Una hoja de ruta hacia la descarbonización
Jet2 se ha marcado el objetivo de reducir en un 35% las emisiones por pasajero/kilómetro en 2035 respecto a los niveles de 2019. Para lograrlo, la compañía está renovando su flota con aviones de nueva generación Airbus A321 neo, que consumen entre un 20% y un 30% menos de combustible que los modelos anteriores, además de promover el uso de combustibles sostenibles (SAF) y eliminar los plásticos de un solo uso a bordo.
Sin embargo, aunque la compañía encargó 155 Airbus del modelo A321 neo hace cinco años, los plazos de entrega de los aviones son largos, indica Querol. “En 2023 ya tuvimos la entrega del primer avión y a fecha de hoy ya hemos recibido 20 aeronaves”.
El directivo recordó que la falta de producción suficiente de SAF sigue siendo un obstáculo importante, pero también una oportunidad: “En España se calcula que harían falta entre 40 y 50 plantas de SAF para cubrir la demanda nacional y, además, podríamos ser exportadores. Pero la burocracia ralentiza los procesos y el coste del SAF sigue siendo mucho mayor que el del queroseno”.
Un cambio de paradigma compartido
Querol subrayó que la coordinación entre aerolíneas, aeropuertos y destinos será esencial para cumplir los objetivos de descarbonización. Pone como ejemplo el espacio aéreo único europeo, una medida que permitiría reducir de forma inmediata hasta un 10% las emisiones si se lograra implementar plenamente.
“Nunca se habla de ello, pero el cielo único europeo tendría un gran impacto: menos emisiones, menos tiempo de vuelo y una mejor gestión de las capacidades y las horas punta”, apuntó.
El responsable de Jet2 considera que España “está liderando un nuevo modelo de turismo sostenible”, con una estrategia donde se alinean los planes de descarbonización de las aerolíneas y de la red aeroportuaria de AENA, así como la hoja de ruta de Turespaña y de numerosas comunidades autónomas.
“España está a años luz de otros destinos turísticos y por eso está liderando este cambio hacia el turismo sostenible. Hay otros destinos que están en la España de los 90”, afirma.
Economías de escala al servicio de los destinos
El ejecutivo defiende que los turoperadores con aerolínea propia pueden ser aliados esenciales para los destinos. “Cuando se habla de sostenibilidad, a veces se criminaliza la turoperación a gran escala, y no debería ser así. Sin la grande, la pequeña, que depende de las plazas de aviones, tampoco puede funcionar”, argumentó.
“Llevamos un millón de turistas británicos al año a Tenerife, y el 70% se aloja en hoteles. Esa masa crítica permite distribuir visitantes por el territorio. Además, gracias a nuestra información, los destinos pueden entender mejor quién les visita, qué buscan y cómo diversificar su oferta”, añadió.
Para Querol, el futuro del turismo sostenible pasa por reforzar esa colaboración entre todos los actores: “La turoperación del 2025 no tiene nada que ver con la de los 90. El concepto sigue siendo el mismo -un paquete turístico- pero ese paquete evoluciona. Tenemos que adaptarnos a las nuevas demandas e inquietudes, y hacerlo junto con los destinos”.
