
Los hoteles de lujo y gran lujo no solo son atractivos para el cliente externo sino, también, para el interno, lo que minimiza, en parte, una de las preocupaciones de la mayoría de los empresarios turísticos: encontrar y retener talento. Así lo han constatado Abel Matutes, presidente de Palladium Hotel Group y Gonzalo Aguilar, Chief Executive Officer Minor Hotels Europe & Americas en el desayuno de La Industria de la Felicidad, organizado por Hotusa, en el Eurostars Madrid Tower y moderado por Manuel Molina, director de HOSTELTUR.
Para Aguilar, las marcas de lujo tienen un especial encanto que ayuda a retener a los trabajadores. “En los hoteles de lujo y gran lujo, los empleados se sienten orgullosos de estar en ese entorno, obviamente, ayuda la retribución, pero un hotel de estas características es atractivo y sexy para ellos. Es difícil crear ese mismo sentimiento en marcas que son más prácticas y están enfocadas en estándares. Tenemos que ver diferentes formas de fidelizarlos y mantenerlos dentro”.

Asimismo, ha puesto de relieve el absentismo laboral de Europa a diferencia de otros continentes como Asia. “En Europa se ha disparado el absentismo, los empleados transitorios, mientras que en Asia hay bastantes candidatos que quieren entrar en la hospitalidad, así como en Medio Oriente”, ha destacado.
Matutes ha coincidido con Aguilar. “Lo más fácil para nosotros es conseguir y retener talento arriba. Es bastante más fácil llevar plantillas y conseguir talento en los hoteles de lujo que en los de cuatro estrellas”.
En Ibiza, ha puesto como ejemplo Matutes, a Palladium le cuesta encontrar trabajadores para sus hoteles de cuatro estrellas. “Es una cuestión de sentimiento. Tenemos condiciones económicas y paquetes de beneficios para los empleados muy extensos, los tenemos para todas las marcas. Y nos cuesta mucho más llenar la parte de abajo que la de arriba. Es más el sentimiento de trabajar en una marca de élite”.
Cómo fidelizar al cliente interno
Para Matutes está claro que la manera de fidelizar a la plantilla es a través de la formación. “La formación es fundamental, con filosofía de grupo y de marca. También tiene que haber retribución dineraria y no dineraria, quizá esta sea más importante”, ha subrayado.

De derecha a izquierda, Abel Matutes, presidente de Palladium Hotel Group, Gonzalo Aguilar, CEO de Minor Hotels Europe & Americas y Manuel Molina, director de Hosteltur y moderador del debate. Fuente: Hosteltur.
Aguilar, por su parte, ha puesto el ejemplo de su padre que empezó en la industria turística como camarero y fue escalando posiciones hasta convertirse en un ejecutivo hotelero. “El sector hotelero es una industria que crea oportunidades. En Minor tenemos oportunidades por todo el mundo, tenemos que crear esas oportunidades de crecimiento y mejora económica para el empleado y su familia”.