Entre acantilados de roca caliza y praderas verdes se esconde una cala asturiana que pocos viajeros conocen. Su arena blanca y aguas turquesas le han valido el reconocimiento de mejor playa de España en 2020, según la revista especializada Conde Nast Traveler, aunque sigue siendo un rincón tranquilo lejos de las aglomeraciones del verano. Situada en Llanes, esta playa mantiene su carácter salvaje y virgen gracias a la protección medioambiental que la rodea, convirtiéndose en uno de los secretos mejor guardados del litoral cantábrico.
La playa de San Antonio del Mar, en el concejo de Llanes (Asturias), combina arena clara y aguas turquesas en un escenario que muchos asocian más con el Mediterráneo que con el Cantábrico. Sus dimensiones -unos 70 metros de longitud y 40 de anchura en marea baja- le confieren una escala íntima, reforzada por las paredes de roca que la abrazan a ambos lados.
Este aislamiento natural contribuye a que el lugar mantenga la calma incluso en días de mar agitada. Desde lo alto de los acantilados se abre una panorámica única: el azul del océano al norte, los Picos de Europa al fondo y los prados verdes que descienden hasta la arena.
Playa de San Antonio Fuente: Adobe Stock
El enclave se encuentra dentro del Paisaje Protegido de la Costa Oriental de Asturias, una figura de conservación que limita el impacto humano y ha permitido mantener intacto su entorno. No dispone de duchas, bares ni servicios de vigilancia, lo que obliga a los visitantes a extremar el respeto y llevarse consigo todos los residuos.
Precisamente esa ausencia de infraestructuras es lo que ha consolidado su reputación como playa virgen. Es un lugar valorado por viajeros que prefieren huir de las multitudes y disfrutar de un entorno natural auténtico.
Los lectores de ‘Condé Nast Traveler’ eligieron en 2020 esta playa casi virgen de Asturias como la más bonita de España
A solo 15 minutos a pie se encuentra Cuevas de Mar, una playa más amplia y equipada con aparcamiento, chiringuitos y socorristas en temporada. La cercanía entre ambas genera un contraste interesante: mientras Cuevas concentra a la mayoría de los bañistas, San Antonio ofrece un refugio de tranquilidad. Esta dualidad permite a los visitantes elegir entre comodidad o calma, sin necesidad de alejarse demasiado. Muchos combinan ambas opciones en una misma jornada, disfrutando de servicios en Cuevas y de la serenidad en San Antonio.
El acceso más habitual para la playa de San Antonio del Mar es desde Cuevas de Mar. Para llegar, se toma la salida de la A-8 hacia Nueva de Llanes y se sigue la señalización hasta la costa. Desde allí, un sendero corto lleva a la cala en apenas unos minutos.
Playa de San Antonio (Llanes, Asturias) Fuente: Turismo Llanes
Existe también una ruta circular de 3,8 km recogida en portales de senderismo como Wikiloc, con un desnivel moderado que bordea los acantilados. Durante el recorrido se puede visitar la ermita de San Antonio, que marca el límite natural entre las dos playas y ofrece una de las vistas más icónicas de la costa llanisca.
Los alrededores cuentan con alojamientos rurales, pequeños hoteles y un camping en Garaña, lo que facilita organizar una escapada de fin de semana. Más allá del baño, el entorno invita a combinar senderismo, gastronomía local y turismo de naturaleza.
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