
Un día duró la huelga total de Air Canada. Pero no porque hubiera acuerdo sino porque el gobierno progresista del país ordenó que todo el mundo volviera a trabajar, al declarar los servicios de la compañía como claves para el país. Se ha acordado prorrogar el convenio vigente que acabó el pasado 31 de marzo hasta la fecha en que se firme un nuevo acuerdo. Por otro lado, se ha instado a las partes a acudir y aceptar un arbitraje (Air Canadá, paralizada por el paro de los tripulantes).
Reiniciar los vuelos no está siendo fácil y ayer siguió habiendo cancelaciones.
Air Canada emitió un comunicado diciendo que se reiniciaba la actividad pero que durante los próximos siete a diez días todavía había problemas derivados del paro.
“Los pasajeros cuyos vuelos fueron cancelados y no pudieron viajar y que no acepten un reembolso o un crédito para el futuro, tendrán una notificación de la compañía con un nuevo vuelo. Recomendamos no ir al aeropuerto a menos que tengan otro vuelo confirmado. Sugerimos a los viajeros que acudan a las herramientas online de self service porque los centros de atención al público están saturados”.
La compañía informa a los viajeros que no tienen derecho a indemnización alguna. En el caso de Europa, al menos sobre el papel, una huelga del propio personal sí da derecho a la indemnización. No, en cambio, si el personal que provoca la cancelación del vuelo es ajeno a la aerolínea.