
¿Qué son las comisiones de Booking?
Las comisiones de Booking son un cargo que los alojamientos deben pagar por cada reserva realizada a través de su plataforma. Funcionan como una tarifa por intermediación: el establecimiento paga un porcentaje del valor de la reserva a cambio de aparecer en el portal y recibir reservas de sus usuarios.
Es importante tener en cuenta que esta comisión se aplica únicamente cuando la estancia se concreta y representa un coste operativo clave para cualquier propiedad que utilice este canal de venta. Entender cómo funcionan te permitirá gestionar correctamente la rentabilidad de tu alojamiento.
¿Qué porcentaje cobra Booking en comisiones?
Las comisiones de Booking.com no son para todos iguales, pero sí siguen un rango bastante establecido: van del 10% al 25%, y lo más común es que estén en torno al 15% por cada reserva efectiva. El porcentaje exacto depende de factores como el país en el que operas, el tipo de alojamiento y el acuerdo particular que tengas con la plataforma.
Este modelo basado en resultados significa que solo pagas cuando obtienes una reserva real, lo cual puede sonar justo. Sin embargo, si gran parte de tus ventas llegan por este canal, ese 15% empieza a pesar en tus márgenes. Por eso, es importante saber con claridad cuál es tu porcentaje actual y qué opciones tienes para gestionarlo mejor.
¿Cómo calcular las comisiones de Booking?
Calcular las comisiones que debes pagar a Booking es más sencillo de lo que parece, especialmente si ya tienes una cuenta activa en la plataforma. Cada vez que recibes una reserva confirmada, Booking aplica automáticamente el porcentaje acordado (por lo general, entre el 10% y el 25%) sobre el total del importe cobrado al huésped, sin incluir los impuestos locales ni los cargos adicionales que estén exentos.
Por ejemplo, si tu comisión es del 15% y la reserva fue de 200 €, Booking te facturará 30 € de comisión. Esta información queda reflejada en tu extranet de Booking, dentro de la pestaña de Finanzas, donde puedes consultar tanto las reservas individuales como las facturas mensuales.
Además, la comisión se factura una vez al mes, así que conviene tener fondos disponibles en tu cuenta bancaria para evitar bloqueos por impago. Si tienes dudas sobre el porcentaje exacto que se aplica en tu caso, puedes revisarlo en tu Acuerdo de Alojamiento, disponible en la misma extranet, o utilizar su calculadora oficial de comisiones.
Llevar un control regular te ayudará a prevenir sorpresas y a evaluar si tu estrategia de distribución es sostenible a largo plazo.
Tipos de comisiones y tarifas que cobra Booking
A la hora de colaborar con Booking, es importante tener una visión clara de cada coste que interviene en el proceso, veamos los principales a continuación:
- Comisión por reserva: Booking cobra un porcentaje que suele situarse entre el 10 % y el 25 % del importe total de la reserva. Esto incluye el coste de la habitación y también los suplementos que se aplican durante la reserva, como los gastos de limpieza o servicios adicionales.
- Recargos adicionales incluidos en comisiones: la plataforma cobra comisión también sobre tasas adicionales vinculadas a la reserva, como el IVA o GST (impuesto sobre bienes y servicios) aplicado según la normativa local. Sin embargo, no cobra comisión sobre impuestos municipales, como el impuesto turístico.
- Comisión por procesamiento de pagos: Si optas por que Booking gestione los pagos, se aplicará una tarifa adicional según el método: entre un 1 % y un 3,1 % si es por transferencia bancaria, o equivalente a la que aplicaría tu propia entidad de tarjeta virtual cuando se utiliza VCC (tarjeta de crédito virtual).
- Tarifas de limpieza y servicios extra: Aunque tú estableces estas tarifas, si se añaden en el momento de la reserva, Booking imputa la comisión sobre ellas. Es decir, si cobras limpieza o suplementos especiales, también formarán parte del importe sujeto a comisión.
- Comisión por cancelación: Si la cancelación del huésped genera cargo, la OTA retiene una comisión, siempre que se aplique según tu política. No obstante, en casos como “no show”, tarjeta no válida o check-in no garantizado, no se cobra comisión.
El impacto de las comisiones de Booking al beneficio total de tu propiedad
Las comisiones que cobra Booking tienen un impacto directo y, en algunos casos, significativo sobre la rentabilidad final de un alojamiento. Aunque pueden ayudarte a generar reservas y aumentar la ocupación, también pueden reducir de forma considerable el margen de beneficio por estancia si no se gestionan adecuadamente.
Por ejemplo, si tu alojamiento cobra 100 € por noche y Booking aplica una comisión del 15 %, estarás cediendo 15 € por cada reserva. Y, como bien hemos visto en la sección anterior, esto no incluye otros posibles costes como comisiones por procesamiento de pagos, tarifas por servicios extra o gastos de cancelación, que pueden incrementar el coste total por cliente.
Además, al trabajar con tarifas brutas (sin comisión deducida), muchos alojamientos tienden a igualar sus precios en todos los canales, lo que en la práctica puede llevar a ganar menos con cada reserva proveniente de Booking. Esta situación se agrava si el porcentaje de reservas provenientes de OTAs es muy alto, limitando el margen global y reduciendo la rentabilidad incluso cuando la ocupación es buena.
Otro punto clave es que, al asumir comisiones elevadas de forma constante, muchos alojamientos no están invirtiendo lo suficiente en potenciar su canal directo, lo cual prolonga una dependencia que a largo plazo puede limitar su crecimiento y autonomía.
En definitiva, las comisiones no son intrínsecamente negativas, pero requieren una estrategia clara. Analizar su impacto dentro de los márgenes operativos, compararlas con los costes de captación directa, y buscar un equilibrio en la distribución de canales es fundamental para que tu alojamiento maximice el beneficio neto sin renunciar a visibilidad ni competitividad.
¿Se pueden reducir las comisiones y tarifas?
Aunque Booking.com aplica una estructura de comisiones estándar, existen maneras de minimizar su impacto en la rentabilidad de tu alojamiento. No se trata solo de pagar menos, sino de implementar estrategias que optimicen el retorno por cada reserva recibida, aumentando así el beneficio neto.
1. Fomentar las reservas directas
Una de las formas más eficaces de reducir el pago de comisiones es incentivar las reservas a través de tu página web con tu propio motor de reservas. Puedes ofrecer tarifas más atractivas, beneficios exclusivos (como early check-in, upgrades o desayuno gratuito) o implementar un programa de fidelización. Cuantas más reservas lleguen sin intermediarios, menor será tu dependencia de Booking y sus tarifas.
2. Establecer precios diferenciados
En muchos países europeos ya no es obligatorio mantener la paridad de precios con Booking, lo que te permite ofrecer tarifas más competitivas en tu canal directo. Incluso donde aún están estos acuerdos, es posible usar promociones exclusivas, descuentos para móviles o campañas en redes sociales para mejorar tus márgenes sin incumplir condiciones contractuales. Así, podés incentivar la reserva directa sin romper las reglas.
3. Negociar condiciones con Booking
Si tu establecimiento genera un volumen alto de reservas o pertenece a una cadena, puedes negociar directamente con tu Account Manager de Booking para obtener una comisión personalizada. Si bien no siempre se concede, en algunos casos se puede reducir la comisión estándar o acceder a mejores condiciones dentro de programas como el Preferred Partner.
4. Aprovechar la tecnología para automatizar y optimizar
Contar con un ecosistema digital robusto, incluyendo un buen motor de reservas, un channel manager y herramientas de revenue management, te permite gestionar la disponibilidad, precios y visibilidad de forma más precisa. Esto reduce errores, mejora la conversión en canales propios y maximiza la rentabilidad en cada canal de distribución.
5. Aplicar precios dinámicos
Ajustar las tarifas según la demanda, eventos locales o temporada es clave para aumentar los ingresos por reserva, incluso si pagas comisiones. Aplicar precios dinámicos te ayuda a mantenerte competitivo sin bajar precios innecesariamente, lo cual te permite absorber mejor el coste de las comisiones sin sacrificar margen.
6. Reducir el número de habitaciones disponibles en Booking
Una estrategia menos agresiva pero efectiva es limitar el inventario que ofreces en Booking, dejando una mayor cantidad de habitaciones para canales directos. Esto no elimina la presencia en Booking, pero te permite priorizar la conversión en canales donde el coste de adquisición es menor.
Conclusión
En resumen, entender cómo funcionan las comisiones de Booking y su impacto en la rentabilidad de tu alojamiento es fundamental para tomar las mejores decisiones. Si bien estas tarifas son una parte inevitable de trabajar con una de las plataformas de reservas más importantes del mundo, también existen múltiples formas de gestionarlas inteligentemente. Con un enfoque proactivo y bien planificado, puedes equilibrar visibilidad y beneficios sin comprometer tus márgenes.