
Omán, otro de los países de la Península Arábiga que está luchando por incrementar su turismo, ha admitido que negocia “seriamente” con Wizz Air crear una red de rutas desde Muscat, su capital. Como recordarán, la low cost húngara tiene una red de rutas a y desde Abu Dabi que acaba de anunciar que dejará de atender desde el primero de septiembre (El fracaso de Wizz Air: abandona Abu Dabi).
Ahmed Said Al Amri, el máximo responsable de Oman Airports, la entidad estatal que gestionar los aeropuertos del país, reconoció que “estamos en discusiones con Wizz Air sobre la posibilidad de operar vuelos directos desde aeropuertos europeos a Omán, sea desde la capital húngara o desde otras ciudades”.
Sin embargo, Wizz Air tenía en Abu Dabi más que una red de rutas: desde su aeropuerto operaba a varios aeropuertos de repúblicas de la antigua Unión Soviética.
Omán probablemente tenga el mejor producto turístico de la región, pero no ha desarrollado su turismo y de alguna manera en más de una ocasión ha preferido avanzar muy lentamente. La aerolínea nacional, Oman Air, no tiene para nada el mismo peso que cualquiera de las grandes del Golfo y pronto probablemente será superada por Riyadh Airlines, la nueva oferta de Arabia Saudita.