
Entre enero y junio, los inversores nacionales canalizaron más de 1.000 millones de euros hacia el sector hotelero, es decir, el 64% de la inversión total, frente al 46% que representaba en el mismo período del 2024.
Las cadenas hoteleras son las que lideran la actividad, con el 45% del volumen transaccionado, superando el 27% del año anterior
La mayor operación del semestre y de la historia de un activo hotelero en España, fue la compra por parte de la cadena Spring Hotels del complejo Mare Nostrum Resort por 430 millones de euros. Otras compañías hoteleras que ampliaron su porfolio de hoteles en propiedad fueron Alexandre Hotels que se hizo con el hotel Grand Teguise Playa de Lanzarote, Catalonia Hotels & Resorts compró el Hesperia Barcelona del Mar por 28 M€, mientras que Meliá y Banca March adquirieron dos establecimientos en Mallorca y Tenerife, por mencionar algunas operaciones.

El complejo Mare Nostrum Resort fue comprado por Spring Hotels por 430 millones de euros. Fuente: Spring Hotels.
“Los datos de inversión del primer semestre del año confirman la tendencia que venimos apreciando en el sector hotelero desde los últimos 18-24 meses en cuanto a una mayor actividad por parte del capital privado, tanto de cadenas hoteleras nacionales y family offices como de inversores privados”, ha destacado Jorge Ruiz, Head de Hoteles en Iberia de CBRE.
Otros inversores relevantes en 2025 han sido Mazabi, que compró un hotel de lujo en San Sebastián; Iroko Iberia que pagó 22 millones de euros por el Htop Calella Palace, mientras que las sociedades Flame Hotel and Golf Holding y Flame Hotel and Golf Equity, propiedad de fondos gestionadas por Activum, se hicieron con el Fairmont La Hacienda y los campos de golf por 175 M€.
Los hoteles que se están comprando
En la primera mitad del 2025, que es el segundo mejor registro para un primer semestre en los últimos ocho años, se transaccionaron cerca de 70 activos hoteleros, unas 8.100 habitaciones, con una “clara preferencia” por los hoteles de 4 y 5 estrellas, que concentran el 70% del volumen total.
Los datos de CBRE también ponen de manifiesto la “polarización del interés inversor”, ya que, además del segmento de lujo, hubo una fuerte apuesta por los hoteles económicos, que representaron el 20% de las operaciones. Los alojamientos de 3 estrellas han ido perdiendo protagonismo, captando menos del 10% de la inversión.
En cuanto a la tipología, el segmento vacacional “ha recuperado su papel protagonista” en las decisiones de inversión, concentrando el 62% del volumen total transaccionado hasta junio, frente al 53% del mismo periodo del año anterior
Este predominio se entiende al analizar las ubicaciones concretas: las Islas Canarias se posicionaron como el destino preferido por los inversores, acaparando el 38% del total, seguidas por Barcelona (22%) y las Islas Baleares (14%).
Por otra parte, se mantiene la tendencia de reconversión de activos hacia el uso hotelero en los centros urbanos, especialmente en Madrid, impulsada por la elevada demanda turística.