
Este sábado a primera hora era conocido el informe sobre el accidente del B787 de Air India que causó 260 muertos. Los expertos y los pilotos de la India reaccionaron con “serias dudas” sobre el mismo (Los quince segundos que acabaron con el Boeing 787 indio).
Los autores del informe describen cómo los dos pases de combustible aparecieron cerrados a los pocos instantes de que el avión empezara a volar, pero no hablan de las razones por las que eso ha ocurrido. Se dice que los pilotos intentaron reencender los motores, pero no hubo tiempo. El motor 1 llegó a revertir su situación, pero no así el 2, por falta de tiempo.
Algunos pilotos indicaron a Hindustan Times que el informe confunde datos críticos, diciendo que la información que manejan revela la posición de las válvulas del combustible, no de los mandos de cabina, por lo que hace deducciones incorrectas.
Otro especialista sostiene que ese corte de flujo de combustible por parte de un piloto es “impensable”. Tampoco ningún dato de las cámaras de la cabina sugiere que pudo haber sido un piloto. Añade que este informe tendrá serios efectos mundiales porque el avión tiene una gran presencia de control digital y que eso requiere constantes actualizaciones.
El sindicato de pilotos de India denuncia que la investigación ha sido opaca y que se había marginado a su colectivo. Advierte del boletín citado en el informe que habla de un potencial fallo en los controles de combustible de el avión.
Los pilotos se sorprenden de que no se haya entregado ni publicado la grabación completa de las conversaciones en cabina y sólo los extractos que se han considerado oportunos.