
La tecnología RFID (identificación por radiofrecuencia) ha ganado presencia en el sector hotelero como solución para mejorar la trazabilidad y gestión de los textiles. Sin embargo, su implantación no siempre ha generado los resultados esperados, especialmente cuando se lleva a cabo sin una planificación estratégica ni el conocimiento técnico adecuado.
Diversos establecimientos, desde hoteles hasta lavanderías industriales, han incorporado esta innovación con la esperanza de optimizar procesos. No obstante, algunas experiencias han puesto de relieve que la tecnología por sí sola no basta: es necesaria una adaptación a las particularidades de cada negocio y un acompañamiento experto durante todo el proceso de integración.

En este contexto, algunas compañías han apostado por desarrollar perfiles profesionales específicos para maximizar el impacto del RFID. Es el caso de Resuinsa, firma especializada en textiles para hostelería, que ha incorporado a su estructura la figura del responsable de Textiles Inteligentes. Este perfil técnico trabaja de forma conjunta con el cliente para adaptar el sistema RFID a sus necesidades concretas, acompañando todas las fases del proyecto: desde la definición de objetivos hasta la supervisión del funcionamiento del sistema mediante análisis de datos en la nube.
Desde Resuinsa destacan que esta integración no se limita a implantar tecnología, sino que implica un control total del proceso desde la fabricación. Cada prenda se etiqueta con tags RFID de alta calidad y trazabilidad garantizada, con el objetivo de asegurar consistencia y eficiencia en la operativa hotelera.
Más allá de la innovación tecnológica, la trazabilidad de los textiles mediante RFID abre también oportunidades en términos de control de stock, reducción de pérdidas y mejoras en la eficiencia operativa. Pero para que estas ventajas se materialicen, los expertos coinciden en la importancia de un enfoque integral que combine conocimiento técnico, acompañamiento experto y análisis de datos.
Así, el uso del RFID en el sector hotelero se perfila como una herramienta estratégica con potencial para transformar la gestión textil, siempre que se implante con visión a largo plazo y con un equipo preparado para abordar sus desafíos.
Imágenes cedidas: Dave Photoz en Unsplash