

En Alda Hotels, la sostenibilidad es una prioridad estratégica. Conseguir certificaciones como Ecostars nos ha impulsado a transformar nuestra gestión con acciones concretas y de impacto.
Uno de los primeros pasos fue la política de “papel cero”, eliminando el uso de papel mediante la digitalización. Aunque la adaptación inicial fue un reto para algunos procesos, ha mejorado la eficiencia y reducido significativamente los residuos.
En energía, modernizamos sistemas de climatización, sustituyendo calderas por aerotermia y geotermia, además de instalar placas solares. Estas inversiones han optimizado nuestra operación y reducido nuestra huella ambiental.
La gestión de residuos es clave: implementamos reciclaje, eliminamos plásticos de un solo uso y fortalecimos relaciones con proveedores locales, apostando por productos de kilómetro cero para reducir el transporte y apoyar la economía local. También fomentamos la movilidad sostenible con cargadores eléctricos en parkings y bicicletas gratuitas para huéspedes, iniciativas muy bien valoradas. Sin embargo, el mayor reto ha sido alinear al equipo con nuestra visión. A través de formación y comunicación clara sobre los beneficios, logramos su compromiso.
Hemos aprendido que la sostenibilidad no es solo una meta, sino un motor para replantear cómo trabajamos, fortalecer vínculos con el entorno y crear un impacto positivo. En Alda Hotels, creemos que cada paso hacia un futuro más verde abre nuevas oportunidades, demostrando que cuidar el planeta es esencial y una forma de construir un negocio más sólido y conectado con las personas.