Volotea fue la única de las cinco aerolíneas sancionadas por Consumo que logró rebajar la sanción inicial impuesta por Consumo por vulnerar los derechos de los pasajeros con el equipaje de mano (Ratificado: multa de 179 millones a las low cost por cobrar el equipaje de mano).
Según la información a la que ha tenido acceso Preferente, la compañía comandada por Carlos Muñoz fue multada inicialmente con 7,7 millones de euros, cifra que consiguió reducir hasta 1,1 millones (siete veces menos) gracias al recurso de alzada que interpuso.
No corrieron la misma suerte Ryanair, Vueling, Easyjet y Norwegian, cuyas alegaciones no fueron tenidas en cuenta por el departamento que dirige Pablo Bustinduy. Sus sanciones se mantuvieron intactas: 107,7 millones para Ryanair, 39,2 millones para Vueling, 29 millones para Easyjet y 1,6 millones para Norwegian.
Volotea logró esta drástica rebaja de la multa acreditando que los ingresos totales obtenidos por cobrar el equipaje de mano eran muy inferiores a los estimados por Consumo: de 5,9 millones a 317.134,23 euros.
Ryanair intentó la misma estrategia, si bien fracasó debido a que argumentó que le resultaba imposible desglosar dichos ingresos, defendiendo, además, que Consumo carecía de competencia para requerirle dicha información.
Volviendo al caso de Volotea, tras el éxito de su recurso el importe total desglosado fue el siguiente: 989.999,00 euros por cobrar un suplemento por el equipaje de mano; 100.001 euros por exigencia de pago de un recargo por la reserva de asiento a los acompañantes de menores; 10.001 euros por no aceptar el pago en metálico en sus aviones; y 11.000,01 euros por omisiones engañosas de información, expresiones confusas y falta de claridad en los precios publicados, dificultando la comparabilidad de ofertas.