Ryanair endurece su discurso. La low cost acusa a Aena de haber “engañado repetidamente a Ryanair y a los españoles sobre sus tarifas” (Ryanair suprime 800.000 plazas en aeropuertos regionales de España).
“Ha ignorado sistemáticamente la resolución de la DGAC de 2021, que establecía que las tarifas debían permanecer congeladas durante cinco años. El único motivo por el que están congeladas en 2025 es gracias a la intervención de la CNMC; sin embargo, siguen siendo superiores a los niveles determinados por la DGAC en 2021”, señala la compañía (Aena advierte a Ryanair: “Sus exigencias podrían ser ilegales”).
Por otro lado, sostiene que “la afirmación de Aena de que sus tarifas son unas de las más bajas de Europa es falsa”. “La tasa por pasajero en Valladolid es varias veces superior a las de aeropuertos competidores y más eficientes en regiones de Italia o Polonia, donde Ryanair continúa creciendo durante el verano de 2025”, argumenta. Asimismo, asegura que “la afirmación de Aena de que Ryanair paga dos euros por pasajero en cualquier aeropuerto regional de España es rotundamente falsa”.
Ryanair, que dice no haber abierto bases en España desde 2016 por “las excesivas tarifas”, considera que “Aena debería preguntarse por qué Ryanair tiene 8 millones de pasajeros anuales en Málaga y ninguno en Granada. La respuesta es que las tarifas aeroportuarias de Granada son demasiado altas”.
La aerolínea irlandesa explica que “la ineficacia de los esquemas de incentivos de Aena fue reconocida por el ministro Puente, quien, el mismo 13 de diciembre de 2024, confirmó que no habían cumplido su objetivo de aumentar el tráfico en los aeropuertos regionales”.
Por todo ello, insta al Gobierno de España a “romper el monopolio de Aena y permitir que los gobiernos regionales gestionen de manera efectiva sus aeropuertos, con el objetivo de incrementar el tráfico, el turismo y el empleo en las regiones que Aena ha abandonado durante tanto tiempo”.