Cuatro individuos saltaron de un Boeing 737 de Turkish Airlines después de que la aeronave realizara un aterrizaje de emergencia en Malta el pasado 1 de enero, según informa Airlive.
La tripulación, que se dirigía a Marruecos, solicitó permiso para aterrizar debido a que uno de los pasajeros aseguró sentirse mal a bordo. Ya en tierra, el personal de la compañía comenzó a gestionar el caso, pero aprovechando el caos, cuatro hombres se escaparon por la puerta trasera del avión y corrieron hacia la pista.
La policía fue alertada de inmediato y comenzó una persecución para capturarlos. Dos de los fugitivos fueron arrestados, mientras que los otros dos continuaban prófugos. Las autoridades continúan investigando el incidente.
El pasajero que había solicitado el aterrizaje, de nacionalidad marroquí, fue trasladado al Hospital Mater Dei bajo custodia policial. En cuanto al vuelo, después de resolver la situación, el avión continuó su viaje hacia Marruecos sin más inconvenientes.