El ‘efecto Instagram’ está provocando que se colapsen espacios donde hasta hace poco apenas iban turistas
El conocido como ‘efecto Instagram’ está revolucionando el mundo del turismo. Los expertos en redes han llegado a afirmar que plataformas sociales como Instagran, Tik Tok o Youtube condicionan la elección a la hora de viajar, sobre todo de los más jóvenes. Un youtuber tiene mucha más influencia en un turista joven que cualquier catálogo de viajes y sobre todo que un agente de viajes. Según el informe Avis 2019 Travel Trends, el 58% de los viajeros con edades entre los 18 y los 34 años se ven influenciados por la estética de los lugares que aparecen en redes sociales. Y esta tendencia previsiblemente aumentará en los próximos años.
Aplicaciones como Instagram, Youtube o TikTok se han convertido en un escaparate para millones de usuarios que aprovechan su impacto para subir contenidos relacionados con viajes. Los turistas eligen sus destinos eligen sus destinos porque ven contenido en las redes en lugar de acudir a fuentes tradicionales como guías o agencias de viajes.
Según MMGY Global, una agencia de marketing especializada en viajes y hostería, hasta un 34% de los viajeros americanos fue influenciado por TikTok. “Las plataformas sociales y el contenido democratizado suponen un boost (amplificador) en el turismo de destinos emergentes y no tan emergentes, además de una oportunidad para todas las empresas y organismos vinculados al turismo y a la prosperidad de un país o región”, han explicado desde esta agencia especializada.
Los usuarios de estas redes sociales tienen la ventaja de poder visualizar cientos de vídeos sobre los destinos turísticos que quieren conocer, pero el conocido como ‘efecto Instagram’ también tiene aspectos negativos. Durante los últimos años han aumentado los incidentes protagonizados por turistas en destinos populares con el único objetivo de viralizar su contenido.
Bali es uno de los principales destinos difundidos por las redes sociales. Los influencers han elegido Bali para crear contenido para youtuber, Instagram o Tik Tok, pero al mismo tiempo han conseguido masificar el destino. Ante la avalancha de turistas, las autoridades balinesas han tenido que introducir nuevas directrices para los visitantes por el mal comportamiento de muchos turistas que llegaban a la isla buscando los lugares más populares difundidos por los youtubers. (Tik Tok crea el gusto turístico)
En Mallorca el ‘efecto Instagram’ ha provocado una situación sin precedentes en una isla que vive del turismo desde hace década. Los intagramers han hecho famosa una cola en el sur de la isla que hasta hace poco solo conocían los residentes y aquellos que tenían la oportunidad de disfrutar de un espacio paradisiaco y poco frecuentado por los turistas.
Gracias al ‘efecto Instagram’ las aglomeraciones en el Caló des Moro han provocado colas de hasta tres horas para poder entrar en la cala, donde han llegado a congregar 1.000 personas. La playa apenas tiene 30 metros cuadrados y apenas caben cien personas al mismo tiempo, pero desde hace unos años es el ejemplo de cómo las redes sociales han conseguido masificar un destino donde antes no se veían apenas turistas. Este verano los residentes se concentraron y protestaron para exigir que se adopten medidas contra todos aquellos que eligen es Caló des Moro solo por publicar su foto en Instagram y que han masificado la playa(Los antiturismo llevan las protestas a una de las grandes calas de Mallorca)
Conscientes del gran peso que tienen en la elección de viajes, las grandes compañías aéreas y las cadenas hoteleras publican anuncios en Instagram, Tik Tok o Youtube, y recurren a youtubers para tener acceso a un público que, hoy por hoy, solo viaja según lo que descubre en las redes sociales.