Corea está en una crisis política profunda, por lo que el ministro de Transportes está ocupando el cargo provisionalmente. En ese ambiente, ayer decidió someter los más de cien aviones Boeing 737 800 del país a inspecciones adicionales, comprobando especialmente los registros de incidencias mecánicas. La decisión se adoptó tras saberse que otro avión de Jeju tuvo un problema similar al del siniestrado, aunque acabó bien (A toda velocidad y sin control: así fue el fatídico accidente del Boeing 737 coreano).
Estas noticias provocaron una caída del valor de Boeing en Bolsa, pero nada apunta a un fallo estructural del avión, por muchos motivos. En estos momentos, aproximadamente el 15 por ciento de todos los aviones que operan en el mundo son Boeing 737-800, un modelo que se fabrica desde hace 25 años.
En estos momentos no existe ninguna evidencia que explique lo ocurrido con el avión de Jeju Airlines, pero de tratarse de un fallo estructural del avión, debería de existir algún tipo de antecedentes con tantas horas operando.
Los demás aviones de este modelo operando en Corea, además de los 39 de Jeju, son los de T’way, Jin, Eastar Jet, Air Incheon y la más grande, Korean.
La situación en Corea es muy tensa en lo emotivo, porque prácticamente todos los viajeros eran locales.