El crimen organizado, o sea las diferentes familias de la mafia, gana unos 3.300 millones de euros al año con el turismo, según informa Raffaele Rio, presidente del Instituto Demoskopika, e informa L’Echo Touristique (Italia debate una tasa al turismo de hasta 25 euros por noche).
El informe del investigador constata que la próxima celebración del año católico jubilar, en 2025, y de los Juegos Olímpicos de invierno en Milán y Cortina d’Ampezzo, serán las siguientes citas para hacer caja. La ‘Ndrangheta, o sea la rama napolitana de la mafia, supone la mitad de este negocio, mientras que la Camorra, la Cosa Nostra siciliana y otros grupos menores de Apulia se llevan el resto.
Como habrán deducido, los juegos de Cortina y Milán serán al norte, pero el dinero se irá al sur, donde las mafias son poderosísimas. El secreto del procedimiento consiste en que aproximadamente un 15 por ciento de las 48 mil empresas del turismo que participarán de una u otra forma en estos eventos están en crisis financiera y se verán obligadas a sucumbir a los chantajes mafiosos. Básicamente esto consiste en prestarles dinero en condiciones brutales y emplearlos como herramientas para blanquear su dinero de procedencia ilícita.
Rio explica que las mafias atrapan a las empresas en crisis y las pasan a controlar, nutriendo circuitos corruptos.
El turismo va a tener en Italia un 2025 muy prometedor, pero viene de tres o cuatro años horribles, sobre todo porque la salida del Covid en este país se ha retrasado bastante.