Este martes, Icelandair, la aerolínea privada heredera de la compañía de bandera de Islandia, recibió su primer Airbus A321LR, con el que inicia su transformación estratégica y, al tiempo, pone en marcha su divorcio de su pareja histórica, Boeing, por la europea Airbus. La razón más poderosa de Icelandair para esta deserción es que Boeing no tiene reemplazo para el Boeing 757 que operó tantos años con éxito.
El 757 (como ahora los A321 de largo radio) era un avión de dos motores y un pasillo, con capacidad para algo más de 200 pasajeros, con un radio de vuelo que permitía a Icelandair alcanzar perfectamente Europa, Canadá y Estados Unidos. Como su demanda no es espectacular, un avión de dos pasillos le habría creado problemas. Pero Boeing abandonó el 757 y ahora su heredero es el popular A321.
La islandesa ha alquilado a través de un lessor cuatro aviones como el que ven, A321LR, cuya aerolínea de introducción fue TAP de Portugal, y tiene un pedido firme de 13 A321XLR, como el que ya opera Iberia con Boston (Iberia hace historia: primer vuelo con pasajeros del A321XLR).
El avión de la fotografía, con matrícula TF-IAA, voló este martes desde Hamburgo, donde los ensambla Airbus, hasta el aeropuerto de Keflavík, en la capital islandesa. Emplea motores Pratt & Whitney y tiene 165 asientos en clase económica y 22 en Business.
Icelandair, como Jet2 o KLM en Europa, son aerolíneas que volaron siempre con Boeing pero que en los últimos años la abandonaron.