¿Están los europeos cambiando sus destinos vacacionales debido al cambio climático? Las imágenes de turistas huyendo del sofocante calor del Mediterráneo hacia latitudes más frescas se han repetido en nuestros televisores durante los últimos meses. Pero, ¿estamos ante una nueva tendencia o simplemente ante casos aislados? Una extensa encuesta nos ofrece datos clave sobre cómo los europeos están ajustando sus planes de viaje ante el aumento de las temperaturas.
Impacto del cambio climático en los planes de viaje
Los datos que podemos ver en esta infografía proceden de una encuesta realizada el pasado mes de abril por la asociación European Travel Comission, la organización formada por las organizaciones nacionales de turismo de los países europeos.
Así, el informe “Monitoring Sentiment for Intra-European Travel” se basa en una encuesta realizada entre el 2 y el 17 abril de 2024 entre 5.859 personas mayores de edad residentes en Alemania, Reino Unido, Francia, Países Bajos, Italia, Bélgica, Suiza, España, Polonia y Austria.
Cada año, la encuesta incluye preguntas del tipo ¿Qué es lo que más le preocupa actualmente acerca de viajar por Europa?, o ¿Cómo piensa ahorrar en sus próximas vacaciones? o ¿A qué país planea viajar este año?.
Y en esta ocasión, la ETC incluyó una nueva pregunta: ¿Cómo ha influido el cambio climático (fuertes lluvias, olas de calor, incendios forestales, falta de nieve, etc.) en sus hábitos de viaje? Las respuestas facilitadas por 5.859 consumidores europeos revelaron que, efectivamente, hay corrientes de fondo en el mercado.
Por un lado, un 26% de los encuestados afirmaron que el cambio climático no afectaba de ningún modo a sus planes de viaje.
Sin embargo, otro 76% manifestaba que adoptaría diferentes estrategias de adaptación: evitaría viajar a destinos donde se registren temperaturas extremas; o bien elegirá lugares con un clima más estable; cambiará los meses de vacaciones…
- Ningún cambio en absoluto 26%
- Evitaré las temperaturas extremas 17%
- Elegiré destinos con clima más estable 15%
- Seguiré las previsiones meteorológicas 15%
- Optaré por actividades que no dependan del clima 10%
- Cambiaré los meses de vacaciones 8%
- Buscaré actividades con garantía meteorológica 6%
- Otros 3%
¿Cómo afectará la subida de las temperaturas a los flujos turísticos?
Teniendo en cuenta que 2023 fue el año más caliente del planeta desde que tenemos instrumentos para medir temperaturas, está claro que el sector turístico se enfrenta a múltiples desafíos para adaptarse a nuevos escenarios climáticos.
Según el estudio “Regional impact of climate change on European tourism demand”, publicado en 2023 por la Comisión Europea, el calentamiento global provocará una serie de alteraciones en los flujos turísticos en las próximas décadas, que afectarán particularmente a las zonas costeras. Dicho informe realizó diferentes simulaciones para prever cómo el aumento de las temperaturas previsto para el siglo XXI afectaría dichas áreas hacia el año 2100.
Una imagen de Copenhague. Fuente: Adobe Stock
Incidencia en el número de visitantes, consumo de agua…
En opinión de Pablo Díaz Luque, profesor del programa de Turismo de la Universitat Oberta de Catalunya (UOC), “la subida de temperaturas puede tener una gran incidencia en las cifras de turismo”.
“El informe de la Comisión Europea recoge que, si el calentamiento global se incrementara en 4 grados centígrados, el turismo en el sur de España, en la Comunidad Valenciana o en Cataluña podría caer hasta un 9%, mientras que en Gales o en Escocia se incrementaría hasta un 16%. Entonces, estos turistas elegirán otras zonas para las vacaciones, y llegará la masificación a otros lugares“, apunta Díaz Luque.
Por otra parte, aunque cada vez más destinos del sur de Europa implantan medidas para mitigar los efectos del impacto climático (más áreas de sombras, más vegetación, zonas refrigeradas, etc), “si las temperaturas medias siguen subiendo, esto tendrá incidencia en el número de visitantes“, dice el profesor de la UOC.
“Además, el cambio climático genera otras situaciones negativas, como sequías, que pueden repercutir en el turismo si se dan restricciones. De momento, no ha habido restricciones de forma generalizada, pero este año se ha estado cerca, y esto ha abierto el debate de dónde hay que destinar el agua, si a la comunidad local o a la visitante. El debate está abierto”, advierte este experto.
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