La preocupación por el parón de la demanda va in crescendo a medida que pasan los meses. Según confirman en declaraciones a Preferente directivos de algunas de las agencias punteras del mercado español, el consumo turístico continúa muy ralentizado (VECI y Halcón: descuentos como antídoto contra el frenazo turístico).
Lo que a priori fue visto como un bache lógico tras la conclusión de una Semana Santa en la que se registraron grandes cifras, se ha convertido en una tónica que está generando una creciente inquietud en las empresas del sector, que ven peligrar un año que se antojaba récord.
Algunas de ellas, como ya informó Preferente, han decidido estirar e incluso incrementar sus campañas de descuentos para intentar enganchar a un cliente cada vez más afectado por la pérdida de poder adquisitivo a causa de la inflación y temeroso ante la posibilidad de que se produzca una recesión económica (La peligrosa deriva de los créditos rápidos en el turismo).
No obstante, los directivos mantienen cierta esperanza, confiando en que la tendencia pueda revertirse una vez que pase la temporada alta de verano, en la cual, pese a sus esfuerzos a base de acortar márgenes, los altos precios de los productos y servicios turísticos no están ayudando a levantar el consumo.
Entre los factores que podrían haber influido en este frenazo del consumo turístico, expertos consultados por este periódico mencionan, más allá del impacto de la inflación en las familias, el gran comportamiento que tuvieron las campañas de venta anticipada, lo que explicaría el bajón del last minute.
Como publicó Preferente, agencias como Viajes El Corte Inglés, Halcón Viajes, B travel y Viajes Carrefour siguen publicitando grandes rebajas para atraer clientes, una estrategia de la que se desmarcan Nautalia y Azulmarino.