Cuando varios aeropuertos en Europa habían comenzado a dejar de limitar en 100 mililitros los líquidos que se pueden transportar en el equipaje de mano, así como a retirar la obligatoriedad de sacar los aparatos electrónicos, la Unión Europea ha dado marcha atrás. Desde el próximo 1 de septiembre, de nuevo, aunque los aeropuertos tengan los nuevos escáneres CT, no se podrá transportar más de 100 mililitros (Adiós al límite a los líquidos en aeropuertos: los plazos de Aena).
Reino Unido también había seguido esta medida y algunos aeropuertos ya disponen de estos nuevos radares y, por tanto, ya no exigen sacar los aparatos electrónicos y permiten transportar más de cien mililitros.
Pero Europa, para evitar confusiones, nos confunde un poco más y ahora da marcha atrás. La medida quedará en suspenso hasta que todos los aeropuertos del continente estén en condiciones de aplicarla. Esto, literalmente, significa que pasarán varios años antes de que se pueda volver a pasar libremente. Más ridículo, en los aeropuertos con escáneres CT, muchos en Italia, deberán hacer sacar los líquidos pese a que ven perfectamente el contenido.
Gran Bretaña, por el contrario, hasta ayer no había decidido dar marcha atrás y, aunque hay retrasos en la introducción de los nuevos radares, se espera que en 2025 ya quede todo actualizado.