Los resultados de Meliá Hotels International, en palabras de su presidente y consejero delegado, Gabriel Escarrer, “continúan reflejando la positiva evolución del sector turístico en los seis primeros meses del año, en los que el grupo ha sabido capitalizar la fortaleza de la demanda gracias a la estrategia de los últimos años, para recoger ahora los frutos de sus firmes apuestas por la digitalización, la expansión internacional y la renovación y reposicionamiento de sus activos, con una fuerte orientación por los productos premium y de lujo”. Los resultados: ha ganado un 11,2% más hasta alcanzar los 51,4 millones de euros de resultado neto consolidado -con un Ebitda (beneficio bruto de explotación) de 240,3 millones-, reduciendo su deuda en 271,6 millones, que se sitúa en 892,1 millones de euros, avanzando así en su objetivo de finalizar el año con un ratio de deuda neta financiera/Ebitda por debajo de 2,5 veces.
Gabriel Escarrer ha definido este primer semestre en términos operativos como “positivo, marcado por la plena recuperación de los niveles de ocupación tanto de ocio como de negocio y corporativo previos a la pandemia. Esta tendencia, combinada con la fortaleza de las tarifas, nos ha permitido registrar un incremento de RevPAR (ingresos por habitación disponible) de doble dígito (+13,2%), que prolonga la destacada evolución (+15,6%) del primer trimestre del año”.
Los ingresos consolidados, según ha añadido, “confirman igualmente esta positiva dinámica, ascendiendo hasta junio a 960,1 millones de euros, un 5,5% más respecto al año anterior”; si bien, como reconocen desde la compañía, “la comparativa queda ligeramente desvirtuada por el efecto de algunos extraordinarios en el segundo trimestre de 2023. Sin tener en cuenta estos efectos, el incremento de ingresos en la primera mitad del año hubiera sido del 11,7% con relación al mismo periodo del pasado ejercicio”.
Meliá Isla Canela, que esta temporada ha reabierto completamente renovado, dentro de la estrategia de reposicionamiento que tan buenos resultados le está dando a la cadena. Fuente: Meliá.
Y todo gracias al mantenimiento de la tendencia positiva de la demanda, el aumento de la conectividad internacional y una creciente disposición a viajar, lo que se refleja en una mayor afluencia de clientes en los hoteles de la cadena en los principales destinos. Como resultado de ello la ocupación media se ha incrementado en 3,5 puntos respecto al año anterior; mientras las tarifas han subido hasta junio un 6,6%, resultado de, según apuntan desde la hotelera, “su sólida apuesta por el reposicionamiento de sus activos y de la creciente orientación de su portfolio hacia el segmento premium y de lujo, que mantiene (junto con las habitaciones superiores en todos sus establecimientos) una demanda mayor”.
Nuevas firmas y aperturas de hoteles
Prueba de ello es el fuerte impulso que dará a sus marcas de lujo en los próximos años, como a ME by Meliá, de la que abrirá tres hoteles este año en Sayulita (México), Malta y Lisboa; otros tres en 2025 (en Guadalajara-México, Málaga y Marbella); uno en San Miguel de Allende (México) en 2026, y dos en 2028, en Albania y Guangzhou (China).
La marca Gran Meliá prevé también estrenarse con tres grandes hoteles en Dubai, México y Albania; y la de hoteles de lujo únicos y singulares The Meliá Collection entrará asimismo en China, Albania y México, además de seguir creciendo en España e Italia. En el segmento premium, ZEL Hotels, con Rafa Nadal, tiene nuevas aperturas previstas en Madrid y México (2025) y Albania (2027); mientras la marca Innside by Meliá llegará por primera vez a países como Malta (2025), Grecia (2025), Portugal o Sicilia (2025).
Y es que, en línea con su compromiso de firmar un mínimo de 30 hoteles al año con aproximadamente 7.000 habitaciones, afianzando así un crecimiento estratégico y sostenible, Meliá ha firmado hasta la fecha 27 nuevos proyectos, todos ellos bajo fórmulas poco intensivas en capital, como gestión y franquicia, en países como Malta, donde firmó ocho nuevos hoteles; Albania, con cinco; o Tailandia, Cuba y España, con dos nuevos establecimientos incorporados, y una nueva firma en Grecia.
Además, hasta la fecha, Meliá ha abierto 13 nuevos hoteles, seis de ellos en España, y hasta final de año tiene previstas otras ocho aperturas en España, Cuba, Portugal, Malta y México. Las más recientes han sido:
– Torre Melina (antiguo hotel Juan Carlos) abre sus puertas en Barcelona
– Así es el hotel ZEL que abren Rafa Nadal y Meliá en Tossa de Mar
– El Gran Hotel Monterrey reabre como el 5 estrellas Meliá Lloret de Mar
– Alianza entre Meliá y Summum Hotel: 500 habitaciones en 5 años
– La marca hotelera The Meliá Collection debuta en la Península
– Meliá abre las puertas de su primer hotel Innside en Tenerife
– Meliá y Banca March abren en Ibiza el hotel fruto de su alianza estratégica
– Meliá se afianza en Albania con 4 hoteles abiertos y 15 en desarrollo
– La marca Innside by Meliá debuta en Portugal de la mano de Hoti Hoteis
Perspectivas tercer trimestre
Las estimaciones de Meliá para el tercer trimestre, tan importante para el Grupo dado su fuerte componente vacacional, apuntan a una nueva temporada positiva que superaría, por tercer año consecutivo, las cifras de los pasados ejercicios. Las tendencias operativas se mantienen en positivo y sin indicios de ralentización, tanto para los hoteles de ocio como para los urbanos con clientela corporativa, segmento que recuperará este año sus niveles previos a la pandemia.
La cadena mantiene la previsión realizada el pasado mes de mayo de finalizar el año con un aumento de doble dígito bajo del RevPAR, con una mayor ponderación del incremento de tarifas sobre el del nivel de ocupación, y espera cumplir también el objetivo de Ebitda anual manifestado, de al menos 525 millones de euros.