En los últimos años, el turismo deportivo ha emergido como un pilar fundamental de la economía global, impulsado por la globalización, la creciente movilidad y la popularidad de eventos deportivos masivos. Representando aproximadamente el 10% del turismo mundial, esta industria genera más de 700.000 millones de dólares anuales (655.000 millones de euros), consolidándose como una significativa fuente de ingresos para muchas ciudades y países.
De acuerdo con la ONU Turismo, eventos como los Juegos Olímpicos y los campeonatos de fútbol mundial, como la Eurocopa, que ya ha comenzado en Alemania, han sido clave en el crecimiento del turismo deportivo. Estos eventos no solo diversifican la economía de los destinos, sino que también fomentan el crecimiento y el desarrollo sostenible.
España: Un caso de éxito en turismo deportivo
España es un ejemplo destacado del auge del turismo deportivo. En 2023, más de 5,3 millones de viajes se realizaron principalmente por motivos deportivos, generando un gasto total de 2.845 millones de euros, con 1.551 millones provenientes de turistas internacionales y 1.293 millones de residentes en España, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE). El 4,2% de los viajes por ocio, recreo o vacaciones de los residentes en España estuvieron relacionados con el deporte, mientras que esta cifra alcanzó el 1,7% para los turistas internacionales.
De esta manera, los datos corroboran que los españoles son unos de los europeos más interesados en asistir a eventos deportivos destacados como los Juegos Olímpicos de París y la Eurocopa en Alemania 2024.
Aumento de las reservas para los Juegos Olímpicos y la Eurocopa
La globalización ha permitido a los fanáticos del deporte acceder a información y eventos de manera rápida y sencilla. Las estrategias de marketing han evolucionado, utilizando plataformas digitales para promocionar eventos y destinos deportivos, alcanzando audiencias más amplias y diversas. El turismo deportivo no solo genera ingresos a través de la asistencia a eventos, sino también mediante el gasto en hospedaje, alimentación, transporte y entretenimiento, beneficiando a una amplia gama de negocios locales.
El impacto económico local es significativo, ya que los turistas deportivos gastan en alojamiento, alimentación, transporte y entretenimiento. Durante eventos como los Juegos Olímpicos y la Eurocopa, las ciudades anfitrionas experimentan un aumento notable en la demanda de servicios, lo que a su vez incrementa los precios y las ventas locales. Por ejemplo, durante los Juegos Olímpicos de Londres 2012, las tarifas hoteleras aumentaron un 31%, y los restaurantes y bares duplicaron sus ventas durante la Copa Mundial de Fútbol de 2014.
En París, el 40% de los viajeros se queda entre 7 y 13 días. Según datos de eDreams Odigeo, París y las ciudades alemanas que acogen la Eurocopa han visto un aumento significativo en las reservas. París registró un incremento del 62% en las reservas para este verano, mientras que las sedes alemanas del torneo europeo experimentaron un aumento del 60%. Concretamente, algunas ciudades de Alemania como Leipzig, Dusseldorf y Stuttgart han visto incrementos en reservas de hasta un 175% y los principales viajeros a Alemania para la Eurocopa son británicos (19%), seguidos de austríacos (15%) y españoles (12%).