

La caída de la demanda en el sector hotelero causada por la crisis del Coronavirus ha provocado que muchos hoteles acudan a un descenso significativo de sus precios, entrando así en una guerra de precios como una “falsa” estrategia de aceleración en la recuperación económica. Decimos “falsa” porque expertos del sector como Javier Serrano, responsable de STR en España y Portugal, coinciden en que “cuando se devalúan los precios se tarda el doble de tiempo en recuperarlos que lo que duró la caída”.
Además, si de algo nos ha servido la historia es para aprender, y si nos fijamos en crisis anteriores como la del 2008 sucedió algo similar, los hoteles redujeron el precio provocando a su vez que se redujera el RevPar (ingreso por habitación disponible) lo que supuso que fueran necesarios 8 años hasta que se recuperaran los precios previos a la crisis, y cinco y seis años en recuperar el RevPar.
De este modo, el hotel que reduce el precio obtiene un beneficio mayor a corto plazo que el que decide mantener el ADR (tarifa media diaria). No obstante, en situaciones como la que estamos viviendo se puede recurrir a otro tipo de alternativas.